Brasil ha alcanzado un récord histórico en casos de dengue, con más de 1,88 millones de contagios en poco más de dos meses y medio, superando los 1,68 millones registrados en todo el año 2015, que ostentaba el máximo de registros hasta la fecha.
Según datos divulgados por el Ministerio de Salud, el país ya supera en 200.000 casos el total reportado en el anterior año récord, lo que representa un hito para una enfermedad en ascenso, atribuida al cambio climático.
En la primera década del 2000, Brasil registraba en promedio poco más de 400.000 casos de dengue por año, pero desde 2011 hasta 2023, esta cifra se ha elevado por encima del millón.
Los efectos del fenómeno climático de El Niño y las altas temperaturas se han hecho sentir especialmente en 2023, contribuyendo al aumento de los contagios.
La enfermedad, transmitida por un mosquito y caracterizada por fiebre alta, ha cobrado la vida de 561 personas, con otras 1.020 bajo investigación.
En respuesta a esta situación, la ciudad de São Paulo, la mayor de Sudamérica, ha decretado estado de emergencia al alcanzar una incidencia de 414 casos por cada 100.000 habitantes.
El Ayuntamiento ha anunciado medidas como el refuerzo de equipos de visita domiciliaria y la ampliación de los horarios de atención sanitaria para hacer frente a la emergencia.
El Gobierno federal estima que los casos podrían llegar a 4,2 millones para finales de 2024, y ha instado a la población a tomar medidas preventivas, como evitar la acumulación de agua estancada en hogares y jardines.
Brasil se convirtió en febrero en el primer país en ofrecer la vacuna contra el dengue a través del sistema público de salud, aunque la disponibilidad limitada de dosis ha restringido su aplicación a niños y adolescentes.